ISi sus uvas se ven cansadas y un poco arrugadas, no las tire, ¡pueden salvarse! Si no he terminado mi racimo de uvas de fin de semana al final de la semana, suelo incorporarlas a una comida: están deliciosas cortadas crudas en una ensalada y combinan bien cocidas en platos dulces y salados.
Intente hornearlos en una fuente como American Grape Pie de Claire Ptak o Black Grape Focaccia de Nigel Slater, o hornee enteros en la vid para usar en todo tipo de platos. Las uvas tostadas tienen un sabor agridulce intenso y hacen un granizado excelente (congelar, luego mezclar), o servir con queso o con ricotta en el horno.
Guarde las uvas crudas en un recipiente abierto en la parte más fría del refrigerador (es decir, úselas como cubitos de hielo o para hornear. Las uvas también hacen un delicioso refresco lacto-fermentado: simplemente sumérjalas en el doble de agua, sazonada al gusto con un toque de azúcar y una pizca de sal, por unos días, hasta que la mezcla comience a burbujear, luego colar o, para una textura más espesa, mezclar y refrigerar.
Asa las uvas en la vid
Las uvas tostadas son un capricho sorprendente que puede transformar incluso un racimo bastante cansado en un manjar digno de las mejores cenas. (Si no tiene ganas de encender el horno, también son deliciosos fritos o asados, aunque no tendrán la misma intensidad que un asado lento). Guárdelos en el refrigerador hasta por cinco días o congélelos. ellos. utilizar según sea necesario. Me encantan mezclados con verduras asadas, mezclados en batidos o servidos con ricotta horneada.
1 racimo de uvas en la vid
Para servir (opcional)
Ricotta al horno
Ralladura de limón
Aceite de oliva virgen extra
querida
Coloque las uvas en una bandeja para hornear y ase en el horno a 200 ° C (180 ° C) / 390 ° F / gas 6 durante 50-60 minutos, hasta que las uvas comiencen a marchitarse y caramelizarse, pero aún tengan cuerpo (guardar energía y aprovechar al máximo el horno al asar verduras o cocinar la cena con uvas).
Sirva como parte de una tabla de quesos o con una ricota horneada junto a ellos. Para terminar, aliña con ralladura de limón opcional, aceite de oliva y miel.