Sincluso hace años, Jay Blades era como una de esas máquinas de discos rotas o juguetes apilados que los clientes llorosos traen a su casa. Taller de reparación. A los 45 años, después de una vida media de golpes y…
Noticias gastronomicas tan sabrosas como unas pitas
Sincluso hace años, Jay Blades era como una de esas máquinas de discos rotas o juguetes apilados que los clientes llorosos traen a su casa. Taller de reparación. A los 45 años, después de una vida media de golpes y…